Manolo el mediador

¿Qué ocurre? no entiendo nada, me he quedado dormido, he vuelto a saltar en el tiempo y al despertar estoy en un sitio muy grande, hay mucha gente, estoy durmiendo en el suelo, mamá esta conmigo también en el suelo y me tranquiliza, al incorporarme veo a papá muy enfadado chillando a una señora disfrazada igual que otras tres que están detrás del mostrador, mi primer ímpetu ha sido levantarme para ayudar, pero soy muy pequeño. Mamá dice que esta muy cansada que llevamos ya 30 horas tirados en un aeropuerto y que no vamos a llegar a la playa. No se que tendrá que ver, no creo que cierren la playa, además mi papá lo va a solucionar y nos iremos en un avión muy grande.

La espera se va alargando, mamá y papá están muy enfadados pero estoy tranquilo porque sé que no es mi culpa, yo estoy pasandolo bien, he conocido a otros chicos que iban a sitios muy raros, gente que tiene a los abuelos muy lejos o que iban con sus padres a lugares muy muy lejanos de aventura. Es fantástico te cuentan cada historia, creo que estoy haciendo un montón de amigos, hemos corrido por todo el aeropuerto, saltado maletas  y hasta a gente que estaba durmiendo. Ha habido un momento de crisis cuando nos hemos alejado otros dos chicos y yo, entre tanto barullo no se veía a nuestro padres, Juan que era el menor de los tres, ha empezado a llorar y hemos tenido que consolarle, llamaba incesantemente y ha organizado un tumulto alrededor de señores muy raros que hablaban en otro idioma y no nos entendían. De pronto ha aparecido una amiga de la que discutía con mi padre, lo se por el traje que llevaba, así que le he dicho yo cuatro cosas, la he dejado con la boca abierta, no hay derecho, mis padres estaban muy preocupados, nos iban a cerrar la playa y no nos podríamos bañar, que se lo dijera al señor del avión y que nos pasara a recoger inmediatamente. Estaría bueno pues no me conocen a mí.

En ese momento ha llegado mi madre y me ha dado cien besos y abrazos como si no me hubiera visto en un año. Vaya, se que he estado bien, que ahora se solucionará gracias a lo que le dije a la señora, pero no es para ponerse así de melosa.

Un comentario en “Manolo el mediador

  1. Marta dijo:

    Ahí va un comentario de demagogia barata, lo siento…
    Qué pena que los que de verdad cobran una «mierda de sueldo» por trabajar 12 horas seguidas no tengan tanto poder para poder reivindicar también sus derechos.
    Siento el lenguaje, pero no me sale otro. Siempre habrá cuidadanos de primera y de segunda. Yo me identifico más con los últimos.

Deja un comentario